Cap 71

Yo: Por favor!

Me llevó a un estudio en una habitación a parte, donde se encontraban paraguas gigantes, una gran cantidad de cámaras, un fondo completamente blanco al igual que el suelo, y unas luces que podrían dejarte ciego si no parpadeas seguido.

Edward: Bueno, aquí es!

Yo: Genial, disculpe mi ignorancia pero... qué debo hacer?

Edward: Primero, ponte esto -Señaló un conjunto compuesto por una mini falda de jean una blusa y unos tacos-

Yo: De acuerdo -Miré la ropa extrañada ya que la falda me pareció algo pequeña-

Edward: Escenografía!! -Gritó mientras daba dos aplausos seguidos-

Trajeron un sillón rosa, y lo colocaron en frente a esas grandes cámaras y luces.

Edward: Qué haces aquí todavía? Esto tiene que ser rápido Vanesa! Ve a cambiarte!

Yo: Si, si lo siento! -Dije mientras corría al vestidor-

Una vez cambiada, me dí el último vistazo al espejo de aquel gran vestidor, el conjunto era maravilloso, pero la pollera extremadamente corta, y eso me intimidaba frente a personas que no conocía.
Salí de una buena vez y todos los camarógrafos e iluminadores voltearon. A caso tenía la blusa puesta al revés? Cómo podían mirarme con esos ojos, hombres de mínimo 22 años! Y la mayoría podrían estar casados.

Edward: Muy bien, muy bien! Vuelvan a su trabajo!! -Dijo poniendo órden en aquella sala alborotada por mi presencia-

Yo: Y ahora? -Dije parada en el medio de todo el mundo-

Edward: Siéntate en el sillón y posa para mí muñeca! -Dijo sosteniendo su cámara enfocando-

Estaba nerviosa, todo el mundo mirando. Me senté normalmente en el sillón y sonreí  como para una foto familiar, literalmente NO SABÍA COMO POSAR, nunca lo había hecho en mi vida. Edward apartó la cámara de su rostro y con una cara seria y fastidiada me preguntó...

Edward: Me estas jugando una broma?

Yo: Eh? -Borrando la sonrisa de mi rostro, confundida-

Edward: Esta no es la foto del anuario muñeca!! -Dijo elevando el tono de voz-

Yo: Lo siento -Dije disculpándome, al no saber que hacer con tanta vergüenza-

Edward: No, yo lo siento. -Calmándose- Es que te veo tan seductora y provocativa que me olvido de que no eres una modelo profesional -Dijo sin pelos en la lengua-

Yo: Ah, gracias)?

Edward: No, no fue un cumplido, de veras me olvido! -Riendo-

Yo: Ah! -Reí con él-

Edward: Puedo hacer algo que tal vez ayude!

Yo: A qué?

Edward: A que te sueltes un poco! Música por favor! -Le dijo a una de sus asistentes-

David Guetta, Will i am, Taio Cruz, Lady Gaga, Rihanna, Katy perry y una serie de artistas más, empezaron a sonar en ese gran equipo de audio, de verdad funcionaba!! Me solté completamente y comencé a hacer poses que nunca en mi vida se me ocurrirían!

Edward: Suficiente! -Bajando la cámara de su rostro- Vanesa eres una diosa!!

Yo: Gracias -Me ruboricé-

Que un hombre tan guapo y mayor que tu, te diga esas cosas no ocurre todos los días!

Edward: De acuerdo, la foto que voy a publicar junto a tu artículo en la revista es esta -Me mostró la foto- Saliste muy muy bien! Una de las mejores fotos que eh sacado en mi vida!

Y así continuamos cambiando escenografías, vestuario, peinado y maquillaje.
Así es como quedaron las fotos definitivas:

Después de tantos cambios de looks, maquillaje, ropa, llegó el momento de tomar la foto en bikini, Edward me dio el bikini, y me cambié en el vestuario. Salí de este con mi bata puesta, y cuando me la quité pude notar que Edward miraba a los iluminadores y el resto del personal con odio, en señal de que no me dijeran nada que me haga sentir incómoda.

Edward: Muy bien Vanesa, quítate la bata -Sonrió como si estuviera emocionado-

Yo: No lo sé -Dije tímida-

Edward: Tranquila, no va a pasar nada, solo son unas fotos -Me dijo intentando calmarme- Música!

Aunque el equipo de audio estuviera encendido, no me ayudaba en nada, mis nervios eran  los mismos y si no hubiera tenido la bata no hubiera salido del vestuario.
Me quité por fin la bata, y Edward abrió los ojos para pestañear seguido 2 veces en señal de asombro, sacudió su cabeza y preguntó...

Edward: Vanesa -Se aclaró la garganta- Cuántos años tienes?


Yo: 16 -Dije tímida-

Solo quería que me sacara la maldita foto y ya!

Edward: Segura?

Yo: Si! Cómo no voy a estar segura de la edad que tengo!?

Edward: De acuerdo sigamos -Tomó su cámara-

Tomó las fotos con un ventilador encendido, de manera que le dé efecto a mi cabello. Nuevamente cambiaron la escenografía del estudio y me dieron un nuevo bikini.

Las fotos quedaron así:

 Y así quedó la tapa de la revista:

Los títulos no eran lo que esperaba, bueno, mas o menos.
Decían lo siguiente:

Vanessa Hudgens la chica de Bieber! -En la portada-

El mejor cuerpo adolescente "El mejor ejercicio es el baile" dice la guapísima Hudgens. -En la portada-

Tips de cómo ser la chica del ídolo adolescente: Él dice que basta con una linda sonrisa, pero parece que va más allá de eso! -Y mostraban la otra foto en bikini en uno de lo artículos-

Look de Vanesa, casual pero atrevido! -Decía otro de los artículos-

Pero el que más me dolió, fué un título que se encontraba en la portada, con letra negra y pequeña en una de las esquinas de la revista:

La nueva novia de Justin Bieber.

Tal vez para muchos, no era la gran cosa, pero para mí si. Era como si Justin se hubiera comprado un auto nuevo (de los tantos que tiene) y pusieran en la portada "El nuevo auto de Justin Bieber". No se si se entiende, pero a mi me dolió, otra vez me recordaban que era una más del montón.

Terminamos la sesión, y Will me pasó a buscar. Fué un día agotador, fotos, entrevistas y más fotos. Por suerte las mujeres que me entrevistaron eran razonables, y me permitían reivindicarme, de las atrocidades que la señorita Carla había puesto en mi entrevista con ella.
Era de noche, por fin había llegado a casa, agotada era poco para describir todo el cansancio que sentía, mañana saldrían las 4 revistas con mi portada. Sería un día raro, ya que medio mundo estaría hablando de mí y a travez de eso, les daría la primera impresión de mi a las queridas beliebers de Justin.
Cené tranquila y subí a mi habitación, mientras cenaba se me había ocurrido una buena idea, raro en mí. Me haría un twitter, la razón por la cual no tenía era porque siempre me importó lo que pensaran o dijeran de mí, sé que eso no es bueno, pero en fin, yo era así. Pero hoy ya no más, tendría un twitter propio, después de todo, si quiero ser la novia de Justin tengo que presentarme como se debe a sus belieber, y no hay mejor idea que por twitter.
Una vez terminé, di un vistazo a a mi perfil y puse una foto mía, solo mía, sin Justin. Sabía  que  si ponía una con Justin era como presumirles que tengo a Justin, aunque en parte ellas  también lo tienen. Millones de personas me siguieron instantáneamente, me twitteaban cosas, pero lo que me sorprendió bastante fue que sus beliebers, no me insultaban, sino que se dedicaban  a preguntarme cosas, para saber sobre mí. "Sus fans son increíbles" susurré de lo asombrada que estaba.
En fin, me acosté a dormir con la mente tranquila de que la mayoría no me odiaba y descancé, después de todo mañana nadie me levantaría temprano, era domingo.
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Desperté tranquila, con la luz del día que entraba por mi ventana. Me acomodé de manera de quedar sentada contra el respaldo de mia cama y miré la hora, 11:30, no me preocupaba en lo absoluto. Lo que si me sobresaltó fueron las 3 llamadas perdidas en mi celular a las 8:30 de la mañana. Disqué el número desconocido, y llamé.

Xxx: Hola! Vanesa necesito tu ayuda urgente!!

Yo: Ryan?

Xxx: Sí soy yo!

Yo: Hola, que necesitas?

Ryan: Me acabo de enterar que mañana tengo prueba de matemáticas, y no soy nada bueno en eso! Necesito que me ayudes! Por favor!

Yo: Si, de acuerdo, que estás dando?

Ryan: Ecuaciones, es un repaso del año pasado, o sea que tú estas dando eso este año, así que me puedes ayudar sin tener que estudiar nada! ( Recuerden que Ryan Chris y Chaz eran mayores que Vanesa, por lo tanto estaban en un grado superior de clases)

Yo: De acuerdo, que otra cosa más interesante que ayudar un domingo a un amigo en matemáticas -Dije con ironía-

Ryan: Lo siento, de verdad me olvidé de la prueba!

Yo: Da acuerdo no hay problema, estaré en tu casa en una hora, luego me pasas la dirección  por mensaje.

Ryan: Gracias! Te adoro! Eres la mejor, en serio!

Yo: Si si, ahora ve preparando todo, no sea cosa que tengamos que salir a pedir apuntes!

Ryan: De acuerdo, nos vemos y gracias!

Yo: De nada, adiós!

-Fin de la llamada-

Genial! Un domingo entero estudiando matemáticas, bueno todo sea por Ryan, ahora... mas le vale que le vaya bien!
Me tomé una ducha de 10 min, hice todo lo que se hace dentro de un baño, cepillarme los dientes, peinarme, depilarme, etc.
Bajé pronta a desayunar vestida así:

Cuando me sorprendió ver a Justin sentado en la sala de mi living, mirando televisión.

Yo: Que... que..tu

Justin: Hola linda -Dijo acercándose- hoy es mi día libre así que haremos muchas cosas -Sonrió pervertido mientras me tomaba de la cintura-

Yo: Lo siento Justin pero

Justin: Shhh! -Me calló poniendo su dedo en mis labios, para luego dar un corto beso en ellos- Hace cuánto que no lo hacemos?

Yo: Justin, solo pasaron 4 días -Sonreí-

Justin: No importa -Me pegó a su cuerpo- Eso es mucho.

Yo: Lo lamento pero tengo que hacerlo con Ryan -Dije entreverando mis palabras por lo nerviosa que estaba-

Justin: Qué!?

Yo: No, quiero decir, tengo que estudiar matemáticas con Ryan, tiene prueba mañana!

Justin: Mierda! A caso no podemos tener sexo tranquilos!?

Yo: Justin! -Me reí por su desesperación-

Justin: Cada noche que no te tengo, me imagino con tigo haciéndolo, no puedo contenerme  y termino satisfaciéndome solo -Dijo en mi oído en un todo de susurro-

Esas palabras me estramecieron e hicieron que mi femeneidad palpitara, causándome una evidente excitación.

Justin: Tu no entiendes, te necesito... ahora! -Dijo pegándome aún más, si es que eso era posible, marcando en mi estómago su erección-

Yo: Dios Justin, yo terminaré con Ryan como a las 7 de la tarde, le digo a Will que me invitas a cenar y vamos a tu casa, así te parece?

Su erección se puso mas tensa, al oír mis palabras.

Justin: De acuerdo, pero llega temprano si no quieres que pierda la cabeza. -Dijo soltándome-

Yo: Lo prometo.

Me despedí de Justin y tomé mi desayuno, esa situación me había dejado un poco con ganas, y no era la idea ir a la casa de Ryan  excitada a estudiar matemáticas.
Llegué a la supuesta casa de Ryan y me detuve a tomar mi celular para comprobar el número de puerta. Llamé a la casa y me atendió el, no como esperaba, ya que llevaba unas bermudas de jean y unas bermudas de jean y unas bermudas de jean Y NADA MÁS! Su torso estaba completamente desnudo y mojado, mientras en su hombro colgaba una tohalla azul marino.

Ryan: Hola Vanesa, pasa! Me acabo de terminar de bañar!

Yo: Ho..hola -Sin despegar mi mirada de su abdomen como siempre-

Estaba ya excitada por lo de Justin, y ahora esto? Terminaría acostándome con Ryan!

Ryan: Ella es mi madre Susan.

Me presentó a una mujer de su altura, muy rubia y unos ojos increíblemente celestes.

Susan: Hola Vanesa! Encantada de conocerte -Sonrió- Por cierto, ya compré tu revista -Sonrió pícara- Saliste muy linda -Sacudiendo la revista en su mano-

Yo: Ah, gracias! -Me sonrojé ya que en la tapa estaba yo en bikini-

Ryan: A ver!? -Le arrebato la revista a su madre de las manos- Woh! -Abrió los ojos mirando la portada fijamente-

Susan: Ryan! Se más respetuoso con la novia de tu amigo! -Lo regañó-

Ryan: Estas segura que tienes 16!?

Susan: Tienes 16!? -Preguntó asombrada-

Yo: Si! Por qué todo el mundo me pregunta eso!?

Ryan: Porque este cuerpo no parece de alguien de 16! -Dijo sonriente mirando la revista-

Susan: Ryan!! -Codeando a su hijo-

Yo: No, esta bien, ya me acostumbre -Encojiéndome de hombros-

Susan: No, no debes acostumbrarte, debes ponerlos en su lugar! Sino todo el mundo te dirá lo que quiere!

Yo: Lo sé

Ryan: Bueno vamos a mi habitación?

Yo: De acuerdo.

Subimos a su habitación que era así:

Por desgracia él seguía sin su remera, y yo cada vez más perdía el control, comenzaba a sudar y las piernas me temblaban. Parecía una fiera en celo, todo por que el no traía su camiseta, y también por lo de esta mañana...

Ryan: Bueno -Acomodó sus libros sobre el escritorio- Estas bien? Quieres que abra la ventana? -Me notó nerviosa y calurosa-

Yo: No! Estoy bien, dónde está el baño?

Ryan: Es esa puerta de ahí -Me señaló una puerta al lado de su televisor-

Yo: Gracias -Caminé en dirección a la puerta-

Ryan: Estas segura de que estás bien?

Yo: Si si, perfecta -Me encerré en el baño-

Me mojé la cara, el cuello, todo, todo para intentar apagarme y relajarme un poco. Me di un último vistazo al espejo, y salí del baño, aún algo tensa.

Yo: De acuerdo, solo tengo tiempo hasta las 7 así que tiene que ser rápido, de todos modos no me iré de aquí hasta que no entiendas todo, de acuerdo?

No me respondía, tal vez había notado mi nerviosismo y mi excitación, con solo pensar que me había descubierto me sonrojé.

Yo: Ryan? -Lo llamé al ver que miraba algún punto de mi blusa-

-Narra Ryan-

Cuando entramos a mi habitación, ella se puso un poco tensa y de a poco se le tornaron rojas sus mejillas, pensé que se había sonrojado, pero al ver el acto seguido que hiso al abanicarse disimuladamente con las manos, me di cuenta que estaba sudando.

Ryan: Bueno -Acomodé mis libros sobre el escritorio- Estas bien? Quieres que abra la ventana? -Intentando hacer algo-

Yo: No! Estoy bien, dónde está el baño? -Mirando para todos lados-

Ryan: Es esa puerta de ahí - Le señalé la puerta que daba al baño de mi cuarto-

Yo: Gracias -Caminó en dirección a la puerta-

Ryan: Estas segura de que estás bien? -La noté más nerviosa, a lo mejor estaba enferma-

Yo: Si si, perfecta -Se encerró en el baño-

Me quedé viendo mis apuntes, hasta que Vanesa salió del baño, aún algo tensa. Pero mi mirada se fijó en su cuello empapado y como una pequeña gota de agua avanzaba sin pudor alguno desde su cuello hasta su gran escote producido por aquella camisa. Me volvió loco, avanzaba de a poquito por esos pechos algo descubiertos, yo solo seguía el recorrido de la gotita con mi mirada hasta que se perdiera en su exitante pecho.

Vanesa: Ryan? -Me miró sonrojada-

Mierda! A lo mejor se dio cuenta de que miraba sus pechos.
De pronto noté como mi pene estaba terriblemente tenso, y mi mente decía que la devorara ahí mismo.

Yo: Lo lamento! No quería...

 Me hiba a disculpar por mirar algo que no me corresponde cuando ella me interrumpió.

-Narra Vanesa-

Yo: Lo siento si estoy así, es que Justin me dejo caliente esta mañana, y ahora tu sin remera, me alborota las hormonas -Dije sin pelos en la lengua, disculpándome-

-Narra Ryan-

Un momento, ella estaba caliente al igual que yo? Si no me controlaba ahora la haría mía sin pensarlo.

Yo: Yo, yo también estoy algo caliente, lo lamento, no debería. -Me disculpé- Eres la novia de mi amigo, de mi hermano! -Me llevé las manos a la cabeza pensando la estupidez que me había pasado con alguien que no me corresponde-

-Narra Vanesa-

Esto estaba mal, muy mal, pero no me culpo por sentir esto, porque lo siento, no es algo  que yo decida, no me gusta Ryan, definitivamente no me gusta Ryan, no sé porque me pasa esto.

Yo: De acuerdo, olvidemos esto y sigamos con matemáticas -Sonreí- Un abrazo? -Pedí en un tono de disculpa-

Ryan: Claro, ven acá! -Extendió sus brazos-

Mala idea mala idea mala idea la del abrazo, mi cuerpo estaba caliente, prendido fuego sería la mejor descripción, mi feminidad palpitaba y mis pechos se endurecieron. Sentía todo su abdomen marcado en mi cuerpo, y sin querer, queriendo o instintivamente rocé mi pierna con su entrepierna, cosa que lo excito ya que lo sentí estremecerse en mis brazos.
Él me tomó del rostro y me besó bruscamente, SI, ME BESÓ. Estaba por correrme ahí mismo, no pensé que 4 días sin sexo me fueran a afectar tanto, mis manos pasaron a su abdomen, no  sabía lo que hacía o con que me metía. De pronto siento sus manos frías en mi espalda levantando de a poco mi blusa.
De un momento a otro nuestra ropa estaba en el suelo y nosotros sobre su cama, besándonos, en ropa interior.

Yo: No! Ryan! Que haces!? Esto esta mal! -Me separé de él y me levanté de la cama vistiéndome nuevamente-

Ryan: Vamos, ya estamos aquí nadie se enterará de lo que pasó.

Yo: Qué!?

Ryan: No no no! Lo siento! Que estoy diciendo? -Se levantó a vestirse-

Yo: Lo lamento, no tendría que haber pasado, soy una tonta!

Ryan: Será mejor que te vayas a tu casa y olvidemos las matemáticas.

Yo: No! Te vas a sacar esa prueba alta, si o si. Prometo que esto nunca volverá a pasar!

Ryan: De acuerdo.

Ryan se vistió, esta vez completamente, y yo me puse una remera del equipo de fútbol de Ryan, para no mostrar ninguna curva provocadora.

Ryan: Entonces despejas la x y te da 36!

Yo: Exacto! Eso es! Eres mejor que yo ahora!

Ryan: Gracias Vanesa, no sé que hubiera hecho sin tí.

Miré el reloj las 7:30, mierda!

Yo: Bueno eso es todo Ryan me tengo que ir, mucha suerte! -Tomé mi bolso buscando las llaves del auto-

Ryan: Gracias, de verdad!

Yo: De nada -Le di un beso en la mejilla para tomar el picaporte de la puerta, pero el me detuvo tomándome del brazo-

Ryan: Por favor no le digas lo que pasó a Justin, has como si no hubiese pasado! -Me susurró en el oído-

Hay 2 formas de susurrar en el oído, la primera seduciéndote o la segunda suplicándote que guardes un secreto, en este caso era la segunda.

Yo: Tranquilo, no diré nada, después de todo no pasó nada, ni va a pasar.

Ryan: De acuerdo, adiós Vanesa!

Yo: Adiós!

Me fuí casi que corriendo de su casa, pero no antes de despedirme de su madre. Quité la alarma de mi auto y me subí a este:

Conduje lo más rápido hasta casa, subí a mi habitación expresa y me cambié por algo para ir a cenar con Justin:

Me maquillé y me recogí el pelo así:

Yo: Will! Voy a cenar con Justin vuelvo a las 12! -Grité desde la puerta de entrada-

William: A las 11! Y sin peros!

Yo: -Suspiré- de acuerdo

William: Un momento, el no te pasa a buscar? -Dijo acercándose desde la cocina, limpiándose con un trapo las manos-

Yo: No, supongo que tengo que ir yo -Abriendo la puerta de salida-

Al darme vuelta para seguir mi camino, me impresionó la figura de Justin apoyado en el marco de la puerta con una gran sonrisa que decía más que algo de felicidad.

Yo: Justin me asustaste!

Justin: Estas hermosa -Me miró de arriba abajo sonriendo-

Yo: Gracias -Me sonrojé y bajé la cabeza-

William: Bueno, que se diviertan. La quiero aquí a las 11 Justin! Mañana tiene colegio.

Justin: No hay problema Will. Vamos? -Me tomó de la cintura-

Yo: Si, adiós Will

William: Adiós!

Caminamos hacia su auto, y luego de un rato por fin llegamos a su casa.
Era hermosa, muy elegante, rodeada tanto de seguridad como de paparazzis. En un momento me pregunté por sus padres, al fin los conocería, tal vez estén sus hermanos, estaba realmente emocionada. Cuando bajamos del auto una ola de paparazzis lanzaban preguntas al aire, esperando que alguno de los 2 contestara alguna.

xxx: Justin! Cuándo saldrá tu nuevo disco?

Justin: Estoy trabajando en eso -Respondió mientras me tomaba de la cintura-

xxx: Tu novia es una bomba sexy, la llevarás a la entrega de premios de mañana?

Un momento, Justin no me había insinuado nada de eso, de todos modos tendrá sus razones para no invitarme.

Justin: Todavía no lo eh decidido -Respondió firme-

xxx: Justin! Justin! Tu madre está en Canadá y no vives con tu padre, por lo tanto tienes la casa sola, qué planeas hacer esta noche con Vanesa?

Mmm esa sonó una pregunta muy intensa y con un gran doble sentido.

Justin: Solo cenaremos en mi casa, quiero enseñársela.

xxx: Tienes miedo de que te roben a tu chica si la llevas mañana?

Vi como esa pregunta lo puso un poco tenso, y algo enojado, lo noté ya que apretó con firmeza aún más mi cintura. Y por única vez decidí no quedarme callada.

Yo: Creo que esa pregunta no es adecuada, es obvio que si estamos en una relación tiene que haber confianza entre nosotros, y no creo que Justin desconfíe de mí. -Contesté firme, dejando al hombre callado-

Justin sonrió y negó con la cabeza, mientras me decía un "Eres increíble" en el oído.

Entramos por fin, y el silencio rondaba en aquella casa, salvo por las empleadas que se retiraban diciendo un educado "Buenas noches señor Bieber, me retiro". Justin les respondía con una humilde sonrisa dándo a aquellas sirvientas el paso a retirarse.

Justin: Bueno, estamos solos. -Dijo colgándo su campera en un perchero-

Yo: Bueno -Me asomé a la ventana- No tanto -Viendo la cantidad de paparazzis en la puerta-

Justin: Eso no importa -Cerró la cortina- En mi cuarto no se escucha nada -Sonrió-

Me tomó con firmeza de nuevo de la cintura, y me presionó hacia él, plantándome un beso apasionado y hambriento de algo más. Pero yo tenía mis dudas y preguntas, y debía aclararlas.

Yo: Justin! Espera! -Dije intentando soltarme-

Justin: Y ahora qué?

Yo: Tengo unas preguntas pendientes, que quisiera aclarar.

Justin: Esta bien, dime. -Se sentó en el sillón-

Yo: Si tu mamá esta en Canadá, dónde esta tu papá?

Justin: Mis padres no viven juntos, están divorciados. -Miró el suelo-

Yo: Oh lo lamento, y algún día me los presentarás?

Justin: Claro! En cuanto pueda te llevaré a Candá conmigo a presentarte a mis abuelos y a toda mi familia! Ven aquí -Me señaló sus piernas para que me sentara, y así lo hice-

Yo: Y otra cosa

Justin: Si? -Dijo mientras olía mi pelo y de a poco recorría mi cuello-

Yo: Y..yo quería -Basta Justin! no me dejas articular ninguna palabra!

Justin: Jajaja lo siento -Terminó de recorrer mi cuello-

Yo: Por qué no quieres llevarme a esa entrega de premios?

Justin: Ufff -Dió un gran suspiro- Es que... no se cómo explicarlo

Yo: Dime -Le acaricié el pelo suave y cedoso-

Justin: No me hagas eso, que me dan ganas de devorarte aquí mismo.

Yo: Jaja de acuerdo, pero dime! -Dije impaciente-

Justin: Digamos que el paparazzi no estaba tan equivocado.

Yo: Quieres decir que tienes miedo a que yo me vaya con otros chicos? No confías en mí?

Justin: No, tengo miedo a que los chicos se vayan contigo, entiendes lo que digo?

Yo: Jajajaja -Me eché a reír-

Justin: Qué es lo gracioso -Dijo frustrado-

Yo: Los chicos se van conmigo si yo se los permito, Justin.

Justin: De acuerdo, me convenciste. Puedes venir conmigo, pero tienes que usar un vestido de diseñador, así son las cosas allí.

Yo: Pero cuestan una fortuna Justin!

Justin: De eso no te preocupes -Sonrió-

Yo: De ninguna manera dejaré que pagues mi vestido!

Justin: Eso lo veremos. Terminó el interrogatorio? Por que si no te molesta, me gustaría  pasar  a otra cosa. -Puso su mano en mi muslo subiendo hasta llegar debajo de mi pollera-

Me estremecí en sus brazos y él lo aprovechó complatemente para recostarme en el sillón y darme pequeños besos sobre el cuello.

Yo: Justin! Aquí no, en.. en tu cuarto -Dije mientras luchaba para no correrme con sus besos-

Sin decir ni una palabra, me tomó del trasero pasando mis piernas por alrededor de su cintura,  y sin dejar de besarme me llevó hacia su habitación.
De un momento a otro ya estaba recostada sobre su cama y él sobre mí. Se quitó su camiseta y en ese momento se me heló la piel, cuando recordé lo que había pasado hace unas pocas horas en lo de Ryan.

Justin: Te sientes bien? -Me notó tensa-

Yo: Si si, solo estoy un poco estresada.

Justin: Bueno, te ayudo con eso?

Se inclinó hacia mi y me quitó de un tirón la blusa y de otro mi pollera, ya estaba en ropa interior. Me avalancé sobre él y le quité bestante agitada su pantalón, de nuevo invertimos posiciones y él me quitó mi sujetador.

Justin: Es por eso que no quiero llevarte ahí mañana -Dijo mirando mis pechos descubiertos-

Yo: -Me sonrojé- No entiendo.

Justin: Eres una diosa Vanesa, cualquiera se te tiraría encima -Pasando su lengua por su labio superior, en señal de deseo-

Yo: Bueno, tu estas aquí encima -Dije acotando un poco de humor-

Justin: Jaja y hay que saber aprovechar.

Me besó una y otra vez mientras nos quitábamos la ropa, acariciaba todo mi cuerpo como si fuera la última vez que lo hiba a tener. Y ahí bajo su techo, en su propia casa lo hicimos una vez más, con todo el amor del mundo, y la pasión que nos teníamos.

Justin: Se que te lo digo poco, pero quiero que sepas que te amo. -Me dijo mientras me acariciaba la cabeza, mientras yo descanzaba en su pecho-

Yo: Yo también te amo, nunca pensé que me fuera a enamorar. -Suspiré-

Justin: Y qué se siente para tí? -Preguntó curioso-

Yo: No lo sé, mi estómago tiembla cada vez que te veo, y no puedo vivir sin tí Justin.

Justin: Eso es muy hermoso.

Derrepente una lágrima calló sin aviso por mi mejilla.

Justin: Hey! Por qué lloras? -Dijo secándome la pequeña lágrima-

Yo: Y si me dejas? Y si te aburres de mí? De mi cuerpo?

Justin: No pienses estupideces, yo te amo más que a nadie, tienes un cuerpo envidiable para todas las mujeres con tan solo 16 años, pero lo que más me vuelve loco es tu forma de ser y nunca me voy a cansar de ver a esta preciosa muñeca. Piénsalo así -Me planteó-Es como cuando niño, vez una película y te encanta, y la vez una y otra vez y aunque para los otros sea la misma película, tu nunca te vas a cansar de ella porque siempre tiene algo nuevo o hermoso a lo que no le habías prestado atención. Y cada día que estoy contigo me enamoro de cada detalle de tí.